«Fotografiar a alguien siempre es personal».
Completamente autodidacta.
Amante del blanco y negro.
Captador de escenas y momentos.
Creo que se puede decir que soy un fotógrafo emocional. Ya sea en un trabajo o uno de mis propios proyectos personales, me gusta tomarme el tiempo para conocer el lugar y las personas con las que voy a trabajar. Esto hace las cosas más personales y más profesionales.
Enamorado de las expresiones naturales, de esos momentos que se desarrollan espontáneamente. Si me ves callado e ido, es porque estoy visualizando la composición de la fotografía en mi mente, por eso me gusta desempeñar el papel de observador.
Mi trabajo ha pasado por un largo período de desarrollo y aprendizaje. De empezar como vocación a terminar siendo algo importante en mi vida.